Acura ralentiza la transición a la tracción eléctrica: los híbridos vuelven por sus fueros
Acura lleva mucho tiempo hablando de un futuro totalmente eléctrico, pero ahora se ha visto obligada a revisar sus planes. La empresa admite que tendrá que volver a confiar en los híbridos antes de hacer la transición completa a los VE. Así lo ha confirmado Mike Langel, vicepresidente de ventas nacionales de Acura, en una entrevista con Automotive News.
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Hace unos años, Acura predijo que el 60% de las ventas serían de vehículos eléctricos en 2030. Ahora las proyecciones son más flexibles: "Nuestro plan a largo plazo es vender sólo vehículos eléctricos, pero somos muy flexibles en cuanto a cómo será ese camino", dijo Lengyel.
Esta decisión parece lógica en un contexto de ralentización general de la electrificación. Los compradores no tienen prisa por hacer la transición masiva a los vehículos eléctricos de batería, y los híbridos pueden ser un compromiso temporal.
Acura aún no ha anunciado nuevos modelos híbridos, pero según el analista de AutoForecast Solutions Sam Fiorani, deberían esperarse pronto. Explica que el mercado "no está evolucionando lo bastante rápido para que Acura pase a los vehículos totalmente eléctricos con la rapidez prevista, y tendrán que volver a los híbridos".
También se especula con que la matriz Honda se está replanteando su estrategia de propulsión en general. Por ejemplo, el crossover RDX estaba previsto que desapareciera en 2026, pero ahora podría mantenerse en la gama junto con un coche eléctrico de tamaño similar.
Los coches eléctricos de Acura no van a desaparecer. La empresa sigue desarrollando el ZDX, que se basa en la plataforma Ultium de GM, y también está preparando el compacto RSX EV, que llegará a finales de este año. Acura también ha lanzado recientemente el ADX, un crossover con un motor turbo de 1,5 litros.
Fuente: Automotive News
